ES.

Lágrimas de sal envuelven su rostro arrugado de sentimientos, como si en cada pliegue de su cara rebelde se escondiera una palabra envuelta en sabanas de piel, doblada y encajonada, resguardada de los oídos de los demás; ¿Qué querrá decir?, ¿Qué callan sus ojos y admite su llanto?. ¿Es dolor?, ¿es alegría?, ¿es cinismo?, ¿es deseo?, ¿es esfuerzo?, ¿es compromiso?, ¿es desconsuelo?, ¿es monotonía?... es todo al mismo tiempo, no es nada, o es mucho mas, o es mucho menos... ES.

Es el dolor de las estrellas que representan una a una cada lágrima recorriendo sus mejillas doradas por el sol.

Es la alegría del Señor Siniestro que se esconde en las sombras de lo mas profundo del Hades, disfrutando la desolación de las almas puras.

Es es el cinismo de la vida misma que se empeña en hacer oídos sordos a las plegarias de los dioses del amor profundo.

Es el deseo de sus labios guardadores de pasión, buscando el impacto de esa boca perdida en el viento.

Es el esfuerzo del universo por separar los continentes para agigantar las distancias que los separan del encuentro que selle la vida de todos.

Es el prestigio de sus ojos infinitos que descubren la maravilla en cualquiera, en todos, en pocos, en muchos, en nadie, desde lo mundano hasta la nada incierta.

Es el compromiso de su alma ya cansada de  los desvíos y las piedras del camino; por momentos firmes, por otros cabizbaja, pero en pie.

Es el desconsuelo de su corazón que no entiende al amor como destructor de todo lo vivo en el mundo, ¿cómo el amor de dos almas puede destruirlo todo?.

Es la monotonía de dos cuartos oscuros en los extremos mas opuestos del universo, donde dos corazones laten al mismo tiempo, al mismo ritmo, por el dolor de sentir un amor inconcebible dentro del espacio de lo posible.

Y así, el cielo eterno y el profundo mar se separaron para amarse desde lejos.

Es TODO eso al mismo tiempo, o no es NADA, o es mucho MAS, o es mucho MENOS.... ES!